Desde el enlace siguiente podéis leer el artículo sobre el que están basados los comentarios:
Sociedad Teosòfica:
"La
enseñanza que se nos ha dado sobre la forma de meditar ha sido y es
muy necesaria cuando todavía tenemos que aprender a disciplinar la
mente. El Raja Yoga en este caso sabemos que es el más indicado pues
nos acerca a los niveles superiores mentales y al contacto con nuestro
Yo superior. Pero el Camino se extiende más allá y muchos seres humanos
ya han dado o pueden dar el próximo paso hacia el nuevo objetivo.
El concepto que se tiene de la meditación va mucho más allá de los ejercicios y la forma de meditar que conocemos comúnmente.
Un científico en sus investigaciones puede estar en profunda meditación sin que se lo proponga. En la contemplación de la naturaleza se puede producir un estado meditativo. En la concentración de un estudiante ;en la creación de una obra artística; en la dedicación de una madre a su hijo recién nacido y tantas otras actitudes en que se practica la atención profunda, cuando lo único que existe en aquel momento es el presente, son formas de meditar.
Cada civilización requiere de una nueva meditación, de un nuevo Yoga, y el Yoga que nos corresponde actualmente consiste en la atención constante, es el (Agni Yoga). Un Yoga que no precisa de técnicas ni de poner pensamientos simientes para que la mente los desarrolle. Es en esta atención cuando se produce el Silencio.
Adoptar técnicas y disciplinas practicando algún tipo de Yoga, según para quien todavía es necesario
pero sabiendo que en algún momento tendremos que incorporar en nuestras vidas la Yoga de la nueva era.
Los tiempos se aceleran porqué la consciencia de la humanidad cambia su orientación, y la única forma de no quedarnos atrapados en el pasado es aprender a dar respuesta a la vida ( meditar) de instante en instante
Creo de alguna forma todos estamos intentando adaptarnos a los nuevos tiempos.
Lo importante es tener un Objetivo superior y no dejar de seguirlo. Los obstáculos que nos encontremos en el camino jamás serán insalvables si persistimos y no perdemos la orientación"
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"La primera vez que encarna un ser humano cuando se individualiza, su consciencia es puramente física.
Cuando encarna el Alma por primera vez su consciencia es Crística.
Quizás esta afirmación puede confundir a alguien, pues creemos que el Alma o Yo superior encarna en el mismo instante en que un ser humano se individualiza, sin embargo no es así. El Alma siempre nos acompaña desde el principio en que aparecemos como humanos, estamos unidos a ella por el hilo de la Vida anclado en el corazón, y por el hilo de la consciencia anclado en la cabeza, pero no puede descender al plano externo de la vida porqué los vehículos son demasiado densos para su vibración superior.
Cuando encarna el Alma por primera vez su consciencia es Crística.
Quizás esta afirmación puede confundir a alguien, pues creemos que el Alma o Yo superior encarna en el mismo instante en que un ser humano se individualiza, sin embargo no es así. El Alma siempre nos acompaña desde el principio en que aparecemos como humanos, estamos unidos a ella por el hilo de la Vida anclado en el corazón, y por el hilo de la consciencia anclado en la cabeza, pero no puede descender al plano externo de la vida porqué los vehículos son demasiado densos para su vibración superior.
Para poder manifestarse a través de ellos deberá redimir y sutilizar toda la materia elemental de la que están compuestos.
Los elementos forman parte de la materia. El Alma forma parte del Espíritu.
Mientras nos dejamos arrastrar por las tendencias físicas, emocionales y por la mente concreta, y neguemos el paso al altruismo y a la aspiración superior, quienes dominen nuestros cuerpos y nuestra vida serán los devas elementales que los han construido. y no por el Alma.
Por esta razón es por lo que en el mundo vemos que predominan los valores materiales, porqué todavía no hemos derribado las barreras que impiden al Alma poder expresarse externamente.
Está en nuestras manos decidirnos a dar los pasos necesarios para empezar a demostrar lo que somos en esencia, Almas liberadas cuya cualidad es Amor Inteligente"
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"El
paso que va desde el aspirante en probación a discípulo aceptado,
requiere una gran atención, fuerza de voluntad, persistencia en el
esfuerzo y capacidad de renuncia.
Poco a poco al crear un hábito positivo y un ritmo constante en nuestra vida nuestro caracter se transformará.
En las enseñanzas Teosóficas los Maestros no se inmiscuyen en la vida personal del discípulo ni le dicen lo que tiene que hacer para alinear los vehículos de la personalidad, pues Ellos únicamente tratan con las Almas.
Sin embargo si estamos predispuestos y firmes en avanzar sin detenernos, tendremos que autoimponernos una disciplina personal, y la mejor de ellas consiste en estar atentamente apercibidos de lo que ocurre dentro y fuera de nosotros mismos, practicando la inofensividad y actuando a cada instante como lo haríamos si tuviéramos al Maestro frente a nosotros."
